El Coaching es la mejor manera de tomar conciencia de nuestros talentos y ponerlos a nuestro servicio para llegar a nuestra mejor versión, una manera de hacer que lo que somos, sea. Lo que determinará que lo consigamos o no es el cómo lo haremos y si lo deseamos de verdad.

El primer paso será conocer cuáles son nuestros talentos naturales y una forma sencilla para hacerlo, aunque sea de una forma muy intuitiva, puede ser dándonos respuesta a las siguientes preguntas:

• ¿Qué es aquello que aprendo muy rápido?
• ¿Qué tipo de actividades me atraen más?
• ¿Haciendo qué se me pasa el tiempo sin darme cuenta?
• ¿Qué es aquello que siento que hago de una forma excelente?
• ¿Qué es aquello que me encanta hacer y pienso cuándo cuando puedo hacer esto de nuevo?
• ¿Cuándo me encuentro en mi mejor estado?

Después de este primer paso, y conociendo nuestros talentos, el segundo paso será ponerlos en movimiento, en acción de forma cotidiana para obtener los mejores resultados posibles, responder a las preguntas adecuadas y tomar las reflexiones oportunas, sabiendo que no podemos ni debemos permitirnos no traer a nuestra vida todos los días nuestros mejores talentos para ser felices.

Aunque la perfección no existe, si nos levantamos cada día a buscar nuestra mejor versión, llegaremos a nuestra excelencia.